jueves, 19 de septiembre de 2013

¿Qué puedo hacer si un medico me dice que tengo que cortar con la lactancia?

Después de tanto tiempo, me largo a escribir. Tengo muchas ideas dando vuelta en mi cabeza, muchas cosas que valen la pena registrar y contarles.
Una de ellas y la menos agradable es un situación que me pasó no hace mucho. En estos últimos meses estuve haciéndome estudios, la mayoría de control y cuando llegaba la pregunta ¿Cuál es la fecha de su última menstruación? al decirles cuál era me miraban con cara de sorpresa a lo que les comentaba que como estaba lactando yo no tenía período. Después de ahí se imaginarán los comentarios.
Pero el episodio más desconcertante y que más me molestó, fue una vez que estando con dolor de garganta decido ir a un médico clínico para que me revise porque no quería seguir enferma. En ese momento mi esposo estaba enfermo, mi hijo se estaba recuperando de un resfrío muy fuerte y yo no quería dejar pasar ese dolor porque no quería enfermarme peor y que el resto de mi familia vuelva a recaer.
Cómo mi marido tenía que ir para pedir certificado para presentar al trabajo porque estaba empeorando, aprovecho para ir yo también así nos revisamos los dos. Como fuimos los dos, también vino con nosotros nuestro hijo.
Lo atiende primero a mi esposo y después me atiende a mí. Me pregunta que me pasa y le digo, cuando me pide para revisarme le digo que estoy lactando, que se lo digo en caso que tenga que medicarme. Cuando le digo eso, lo mira a mi hijo y me pregunta cuántos años tiene, le digo que está por cumplir dos. A eso me responde que hasta cuándo pensaba darle la teta. Viendo como venía la mano decido cortar la conversación con sarcasmo y le digo que hasta que vaya a la universidad. Mi esposo se ríe y el médico no dice nada.
Por suerte era más alergia lo que tenía así que no me receta ningún medicamento en cambio me dice que humedezca los pulmones con vapor caliente.
Cómo mi hijo se estaba poniendo nervioso (una combinación de cansancio y sueño ya que no había dormido siesta ese día) sale con el papá del consultorio y yo me quedo con el médico.
Cuándo estoy saliendo de la consulta, tras mi comentario de qué suerte que mi hijo no estaba enfermo y que lo mío era solo alergia, me dice que tengo que ir cortando con la teta. Se pone serio y me dice: "No en serio, ¿hasta cuándo le vas a dar teta?" y yo ya por abrir la puerta le digo "hasta que él quiera". Al que me responde: "cómo hasta que él quiera, no, tenés que cortar vos, qué te dice el pediatra" a lo que yo le contesto que me aconsejó hasta los dos años y después hasta que yo y mi hijo quieran. A lo que me dice que no, que la teta provoca dependencia, además que cuando tome la teta y sus amiguitos lo vean se le van a reir, yo le digo que no es cierto, que no provoca dependencia y le pregunto a cuántos niños de dos años o más conoce que tomen la teta. Si este médico tenía las agallas de afirmar algo así quería saber por lo menos si conocía a niños mayores de dos años que tomen la teta. A lo que me dice que un montón, en el hospital, y que los médicos no se atreven a decirles nada a las mamás que amamantan a niños mayores de dos años porque no tienen ni para comer pero que esos niños tienen muchos problemas de dependencia. Le contesto que no es así y él me dice que le pregunte a los psicólogos.
Me retiro diciéndole que no es verdad, pero con una sensación de indignación e impotencia grandísima.
Mientras volvemos a nuestra casa le cuento a mi esposo lo acontecido. Los dos estábamos enojadísimos. Tenía un montón de cosas que decirle al medico que por respeto no se lo dije, porque ya estabamos saliendo y no quería montarle una escena en frente de sus pacientes, pero tampoco quería dejar las cosas así. No quería que este médico piense que tenía razón en algo así. Pensaba en todas las mamás que irían a su consulta por algún problema menor y que este médico las asuste con semejante malinformación.
Por ello y para descargarme, contacto a la líder de La Liga de la Leche del Gran Buenos Aires. Es la única que conozco y con la que mantengo contacto. Le comento lo acontecido y le pregunto si puedo hacer algo al respecto. A lo que me contesta que me arme bien de información y le escriba una queja formal y la mande al director de la clínica y que además incluya una copia para el doctor en cuestión, adjuntando la información recabada.
Como podrán imaginar ese es el curso que decidí tomar. A continuación les adjunto mi carta:



Santa Fe, 25 de agosto de 2013





Al director de la Clínica __________________,

S     ___________    /                               _      D:



Me dirijo a usted para comunicarle de una mala atención recibida en su clínica por parte del Doctor ___________________. El día _______________________ me presenté a su clínica por un dolor de garganta con mi esposo que también se encontraba enfermo. Le conté qué era lo que me pasaba y le informé que estaba lactando para que lo tenga en cuenta en el caso de que tenga que recetarme algún medicamento. Cuando me revisó me preguntó cuántos años tenía mi hijo, dado que nos había acompañado al consultorio. Le comenté que estaba por cumplir 2 años y me preguntó que hasta cuándo pensaba darle el pecho. Después de ahí vinieron comentarios a forma de consejos sobre este tema que no sólo mostraban una desactualización respecto a la lactancia materna y la edad del destete sino que a la vez mostraban prejuicios personales respecto a la misma. Más allá de que los organismos oficiales como la OMS, la Sociedad Argentina de Pediatría y la Asociación Española de Pediatría, entre otros, aconsejan la lactancia materna hasta los dos años por lo menos y de ahí en más hasta que la mamá y el niño lo desean, mi lactancia materna y la edad de destete de mi hijo no es una opinión que le concierne a ninguna entidad externa. Es algo que nos concierne a mí, a mi hijo y a mi esposo. Esta intromisión me pareció una falta de respeto a mi persona y a la capacidad que como tal tengo de decidir por mí misma y por mi hijo. Además cabe decir que mi lactancia no interfería en ningún tratamiento sobre el que haya consultado a dicho médico.

Entre los comentarios que expresó dicho doctor durante la consulta, los cuales se encuentran completamente errados, pertenecen al folclore popular y no están avalados por estudios científicos, destaco los siguientes:

El doctor me dijo que debía destetar a mi hijo porque la lactancia materna provoca “dependencia” (sin especificar a qué se refería con dicho término);

Que cuando tome el pecho frente a sus amiguitos lo van a ver y se van a reír de él;

Que en los hospitales hay muchas madres que amamantan a sus hijos más allá de los dos años y que los médicos no se animan a decirles nada porque no tienen para comer pero que sus hijos presentan problemas de dependencia.

Toda esta información está llena de prejuicios y demuestran una ignorancia muy grande respecto a la lactancia materna. En primer lugar, la lactancia materna no provoca ningún problema de dependencia ni a mediano, ni a largo plazo: “A modo de conclusión, podemos afirmar que: 1- Desde la Psicología no se ha determinado la edad ideal de destete. 2- No se encuentra o es difícil encontrar estudios científicos que demuestren el perjuicio de la LM prolongada, más bien se han encontrado evidencias de lo contrario. 3-Algunas afirmaciones desde la Psicología se basan en opiniones personales y teorías no contrastadas.” (http://albalactanciamaterna.org/lactancia/articulo-2)

Segundo, su comentario muestra un desconocimiento del comportamiento y el desarrollo evolutivo de los niños ya que a los dos años de edad el entorno social no es tan importante como la familia cercana. Y más allá de ello, como madre, no voy a dejar de hacer algo que considero bueno para mi hijo sólo porque otros niños no lo entiendan y se burlen. En todo caso le enseñaría a mi hijo a lidiar con las presiones sociales y qué sepa defenderse y defender sus creencias de cualquier bullying externo.

Tercero, la lactancia materna prolongada está llena de beneficios, tanto para los niños pobres como para los niños de cualquier clase social. La lactancia materna prolongada ayuda a prevenir enfermedades en los niños (los niños amamantados más allá de los dos años se enferman menos y por menor tiempo, tienen menos riesgo a contraer alergias, entre otros) como así también a las madres (menor riesgo de padecer enfermedades cardíacas, menor riesgo de padecer cáncer de ovarios, útero y mamas, menor riesgo de contraer diabetes, entre otros). Además  la leche materna se adapta a las necesidades nutricionales de cada niño en cada etapa del amamantamiento (http://www.amormaternal.com/2012/01/lactancia-prolongada-beneficios-para-la.html; fuente: “Kellymom”, en inglés: http://www.kellymom.com/bf/bfextended/ebf-benefits.html).

Por todo ello les pido que por favor, insista a los médicos que trabajan en dicha clínica a mantenerse actualizados respecto a la lactancia materna, ya que una opinión personal y desinformada que se dé en el ámbito de un consultorio por parte de un médico puede ser tomada por el paciente como un consejo profesional y eso puede llevar a grandes perjuicios para su salud y la de su hijo/a.

Para finalizar adjunto junto a esta carta información que he recabado sobre lactancia materna en webs muy completas, pasando por los postulados de la OMS respecto a la misma y con información proporcionada por la Liga de la Leche Argentina, para su consideración.

Desde ya muchas gracias por su atención. Lo saluda muy atte.



FIRMA

DNI

 Comparto esta carta para que otras mamás lactantes sepan que tienen esta opción. Sepan que no tienen que quedarse calladas si les pasa lo mismo que a mí. Una de las cosas que más me dolía era el desamparo que sentí. El sentir que no me podía enfermar porque en el momento que tenga que visitar a otro médico, este trate de juzgarme y se crea con el derecho de opinar sobre mi lactancia. 
Para finalizar voy a adjuntar los links de la información que adjunté a mi carta:
Lactancia Prolongada - Isolina Riaño
LACTANCIA PROLONGADA - Katherine A. DettwylerRecomendaciones del Comité de Lactancia de la AEP
Recomendaciones sobre Lactancia Materna del Comité de Lactancia Materna de la AEP

Espero les sea de utilidad toda la información compartida. En caso que usen la carta y los links les pido que comenten como les fue todo ;-)
Y para finalizar, les pregunto ¿Qué piensan ustedes? ¿Qué hubieran hecho si estuvieran en mi lugar? ¿Alguna vez les pasó?


domingo, 8 de julio de 2012

La Sutíl Cultura del Abandono

Este post va con un poquito de bronca y de enojo. El otro día leía en el blog de "Familia libre" un post que se titulaba "Crianza versus Dinero" y la nota hablaba de las madres que deciden dejar de trabajar para poder pasar más tiempo con sus hijos. Lo que planteaba era la disyuntiva sobre si seguir trabajando y ganar más dinero o dejar de trabajar y por ende bajar de nivel económico pero con la ventaja de estar cerca de los hijos. 

Lo que me llamaba mucho la atención era como repercutiría la decisión de quedarse en casa sobre el entorno. Si optabas por quedarte en casa la mayoría te iba a felicitar o iba a creer que estás todo el día sin hacer nada pero cuidando a tus hijos (como si eso no se incluyera en hacer algo, jajaja!!!!). Esto me llamó mucho la atención porque en mi caso estoy luchando a diaro para poder hacer entender a las demás personas el porqué quiero estar en mi casa con mi hijo.

No sé si es algo cultural de mi país o quizá de la clase social donde me muevo pero se mantiene la firme creencia de que las familias que deciden mantener un nivel económico modesto para que sólo uno de los padres permanezca en el hogar se la considera sin ambición. Como si pasar tiempo con los hijos no fuera ambición suficiente; si no tiene retribución económica es una pérdida de tiempo.

Lo que más me molesta es que todo el mundo me dice que lo que queremos hacer mi pareja y yo no se puede, que eventualmente voy a tener que salir a trabajar porque sino no vamos a poder vivir. Todo este tema es muy frustrante, especialmente para mí que creen que quiero vivir en el siglo IX y volver a ser una mantenida o algo por el estilo.

Para aclarar, no tengo mentalidad de mujer del siglo IX, no quiero que me mantengan, pero de lo que estoy segura y estamos seguros con mi pareja es que queremos que ser nosotros los que criemos a nuestros hijos y no un tercero. 

Antes de tener a mi hijo pensabamos como la mayoría y no sólo en este tema, pero llegó Dante y por suerte nos sacudió lo suficiente para sacarnos las capas de preconcepciones que teníamos encima. Con respecto al trabajo, yo quería ser una mujer importante de esas que salen a trabajar a la mañana y no vuelven hasta la noche, total pensaba, para cuidar a mis hijos están los abuelos o si no pueden que vayan a guardería. ¡Cuán lejos de lo que pienso ahora estaba mi yo pasado!

Hoy estoy segura de que quiero que seamos mi marido y yo los que pasemos más tiempo con nuestro hijo. Queremos ser los responsables directos de su crianza, no queremos que otro los eduque por nosotros. Sabemos por lo que leímos y nos informamos que el bebé nos necesita a nosotros y a nadie más para sentirse seguro y feliz. Por supuesto que quiero que los abuelos lo disfruten y pasen tiempo con él, lo que no quiero es que lo crien, que para eso estamos nosotros. 

Pero lo que noto es que hoy en día hay una idea muy arraigada en esta sociedad de que los niños tienen que "acostumbrarse" a estar solos y los padres tienen que dejarlos que se hagan "independientes" ya que como los tiempos son difíciles los dos tienen que salir a trabajar para poder tener un auto, casa, vacaciones, etc. 

Muchos me dicen que tenemos que hacer el sacrificio ahora que nuestro hijo es pequeño para poder conseguir todo esto pero lo que nosotros pensamos es: queremos hacer el sacrificio económico de no darnos todos los gustos ahora que nuestro hijo es pequeño y nos necesita más. Cuando sea más grande y no necesite tanto de nuestra presencia física vamos a estar los dos con más horas de trabajo fuera para poder tener el auto, la casa propia, las vacaciones fuera, etc.

Cuando los niños son pequeños lo único que necesitan es la cercanía física de los padres, no importa cuanto querramos comprarle todos los juguetes caros que pasan por la tele, ellos solamente van a querer a mamá y a papá. De grandes puede que tal vez quieran más cosas materiales pero de chicos sólo quieren estar con nosotros. Por eso no entiendo como la gente no puede entender que elijamos este camino. 

Lo que me enfada es que si nuestra situación económica fuera mejor y yo no trabajara porque no lo necesitáramos y mandara a nuestro hijo a guardería todos nos felicitarían y no nos dirían que tenemos que cambiar de forma de vida, que estamos haciendo mal, que si yo no salgo a trabajar, puedo cuidar de nuestro hijo en vez de pasearme por peluquerías y shoppings. Por desgracia esto es la cultura del abandono de los hijos. Siempre va a ver alguien que se encargue de ellos por nosotros. Por supuesto que después si nuestros hijos no "salen" como uno quiere la frase más usada es "pero con todo el sacrificio que hicimos para darte todo". ¿Realmente se les dio todo? ¿Realemente se les dio lo que necesitaban?

Método Mamá Canguro

Siguiendo con los videos, quiero mostrarles un video que ví que me gustó mucho. Nils Bergman habla sobre el Método Mamá Canguro y lo importante que es que se empieze a utilizar en las salas de neonatología. También habla de lo importante que es el contacto piel con piel entre la mamá y el bebé y cómo esto nos lleva a volver al paradigma original.


Este no es tan largo pero si quieren verlo de a ratitos porque no tienen tanto tiempo ya saben, vayan a esta página y descárguenlo. 
Disfrútenlo y escríbanme para contarme si les gustó o no.

Crianza con Apego por Carlos Gonzalez

El otro día viendo unos videos en Youtube de Laura Gutman, me encontré con este lindísimo video sobre crianza con apego según Carlos Gonzalez. Para aquellos que no lo conozcan, Carlos Gonzalez es un pediatra español que hizo popular este tipo de crianza en España. Escribió varios libros entre ellos "Mamá besame mucho", "Entre tu pediatra y tú", "Un regalo para toda la vida", "Mi niño no me come", entre otros.



El video es bastante largo, creo que dura dos horas pero la verdad vale mucho la pena. En caso que no puedan verlo todo de un tirón les recomiendo que lo bajen en su computadora con esta página poniendo la dirección que aparece cuando abren el video en youtube en el rectángulo azul que dice en un extremo download para que puedan verlo sin tener que estar conectado a internet todo el tiempo.

Espero que lo disfruten tanto como yo.

jueves, 28 de junio de 2012

Día Mundial del Sueño Feliz

Día Mundial del Sueño Feliz


Uno de los blog que sigo bastante, Amor Maternal, propuso festejar el Día Mundial del Sueño Feliz con el fin de desmontar a Estivill, un pediatra que ganó y por desgracia gana mucho dinero difundiendo métodos conductistas y de adiestramiento para dormir a los niños. Aunque por desgracia no es el único que difunde estos métodos es uno de los más conocidos. 

En mi caso tuve la suerte de que la Psicóloga que nos dió el curso de preparto nos habló del colecho. Al principio no me daba mucha confianza por todo el bagaje cultural que por desgracia tenemos todas las parejas primerizas de pensar que eso no es aconsejable. El tema es que las dos primeras semanas de nacido nuestro hijo no la pasamos muy bien a la noche, hasta que después de esas dos semanas lo metí en mi cama para darle la teta y poder dormir. A pesar que mi pediatra no lo aconsejaba por miedo al sofocamiento, desde ahí en adelante dormimos los tres super bien y juntitos. 

Pero por supuesto eso no significa que el resto de la gente con la que estamos opine lo mismo que nosotros y más de una vez tuvimos que defender nuestro punto de vista, como si fuera algo que estuviera mal o como si estuvieramos pecando o algo así. 

Siempre creí los padres tienen que ser libres de elegir lo que ellos creen que es mejor para sus hijos, pero ¿puede uno afirmar que hay libertad de elección cuando no se tiene todo el conocimiento?, ¿cuando sólo se tiene la mitad de la información? Porque yo practico el colecho pero sé que otros padres eligen y defienden el hecho de "acostumbrar" a dormir sólos a sus hijos para que sean más "independientes" (todavía no se que quieren decir algunos padres con eso) y ellos son felices y convecen a sus hijos o por lo menos los tratan de convencer que es lo mejor para ellos. Yo me pregunto, estos padres, ¿saben que no es nada malo dormir con sus hijos, que no hay traumas ni trastornos sino más bien al contrario? Yo creo que la mayoría no tiene mucha idea del mal que les hacen a sus hijos al aplicar métodos de adiestramiento y creo de que es hora de que se inunde la red con la otra cara de la moneda para desmentir y desmontar los métodos conductitas. Por ahí una de esas tenemos suerte y alguna familia o algún niño deja de sufrir por el solo hecho de ser niño y no poder estar a la altura de las espectativas de sus padres, porque le dijeron que tiene que dormir toda la noche solo cuando lo que su cuerpito le pide es compañía.

sábado, 28 de abril de 2012

Visión Adulto-céntrica No, Humano-céntrica Sí

Me asombra como hoy en día todo el mundo te aconseja sobre lo que tenemos que hacer para que nuestros hijos sean independientes, y que se acostumbren a no necesitarnos tanto. Esto me llama mucho la atención porque me pregunto cuantos adultos están acostumbrados a vivir sin necesitar a nadie. 

Pero no es solo esto, también me asombra ver como los adultos quieren que los niños se comporten como adultos y yo creo que es porque tenemos una visión adulto-céntrica errada. Cómo siempre les pedimos a estas pobres criaturas que se comporten como adultos cuando no están biológica, ni psicológicamente preparadas para hacerlo. Queremos que se arreglen solos cuando no son capaces ni de comer solos. Queremos que no se ensucien al comer, queremos que no hagan berrinches, que duerman solitos, que no lloren, que no pidan, que se queden quietitos y un gran etcétera.

Como siempre digo, los adultos durante mucho tiempo dimos vuelta las cosas, y cuando debían mirar a los niños como niños los querían en cambio como adultos. Pero cuando debían mirar a los niños como adultos, los menospreciaban porque eran niños. Con esto quiero decir que cuando debían poner a los niños al mismo nivel que ellos, como seres humanos que son y tratarlos como tratarían a cualquier otro semejante, lo que hacían era todo lo contrario y de esta manera los obligaban a comer lo que no les gustaba, le encajaban la cuchara por más que lloraran, lo zamarreaban demostrando su superioridad, los abofeteaban, les practican un sin fin de intervenciones médicas sin anestesia como los aritos en las niñas y la circuncisión en los niños, todas cosas que ni pensarían en hacerle a un adulto.

¿Por qué nos cuesta tanto dejar que los niños sigan su desarrollo natural y experimenten, jueguen, se ensucien al comer, pregunten, se muevan? Todo esto es lo más natural en los niños. Mi hijo de 8 meses es un terremoto, anda por todos lados, todo lo asombra, quiere moverse, descubrir. Incluso cuando era más chico nunca fue un niño de quedarse quieto y todo el mundo me decía que era "terrible". Yo en cambio no podría imaginármelo de ninguna otra manera, hasta pienso que sería aburrido tener un niño que se queda  quieto y como dicen algunos "que no moleste". ¿Porque nos cuesta dejar que los niños sean niños?

Creo que lo que más les cuesta a la mayoría de los adultos es mirarlos como iguales, en el sentido de tratarlos como les gustaría que otro adulto los tratase a ellos. ¡¡¡Esto es terrible!!! Si nunca le pegarían a un adulto para imponer su voluntad, ¿por qué hacérselo a un niño? Si nunca le meterían a un adulto la cuchara en la boca y lo sujetarían para que coma, ¿por qué hacérselo a sus hijos? El respeto mutuo que los adultos tenemos no lo ganamos por haber superado la infancia, lo tenemos por el sólo hecho de ser seres humanos . Y aunque a algunos les cueste creer, los niños también son personas y merecen respeto. Es hora de que empecemos a tener una visión humano-céntrica en vez de adulto-céntrica y tratemos a nuestros hijos como se lo merecen.

Para que vean como cambia la visión de una persona cuando es niño respecto a la de una persona cuando es adulta, piensen en esto: Si un adulto se levanta a las 5 de la mañana todos los días, sale a correr, trabaja, anda por toda la ciudad y no se queda quieto la mayoría piensa "Que bien, mirá que activo que es". Pero si un niño se levanta a las 5 de la mañana, se pone a jugar, come, sigue jugando, anda, duerme una siestita, pide para ir a dar vueltas en bici o al parque y no se queda quieto en seguida lo quieren medicar porque es hiperactivo. Creo que con los niños, realmente vivimos en el mundo del revés.

Amo Ser Tu Almohada Porque No Quiero Perderme Nada

Amo Ser Tu Almohada: 10 razones para practicar el colecho es un Carnaval de Blogs iniciado por Amor Maternal para tratar de romper con el tabú social que existe en torno a dormir con los hijos, dar a conocer esta opción tan sana y natural como agradable tanto para el niño, como para sus padres y proporcionar información fiable y experiencias personales al respecto.


Amo ser tu almohada: 10 razones para practicar el colecho


Cuando ví este tema en el carnaval de blogs de Amor Maternal pensé en todas las razones más comunes por las que me gusta colechar con mi hijo como por ejemplo seguridad, practicidad, comodidad, tranquilidad, entre otras.  Pero la verdad que la más importante es como dice Aerosmith en su canción, "No quiero perderme nada". Esa es la principal razón. 

Cada vez que estoy durmiendo junto a mi hijo y lo veo cual angelito pegadito a mi me embriago con su presencia y amo ver cada detalle de su carita, amo estar ahí al lado y poder disfrutar de sus suspiros mientras duerme, de sus pataditas cuando está molesto, de sus risas ahora llenas de carcajadas, antes sólo sonrisas, mientras sueña y pienso en lo hermoso que es compartir ese momento de paz juntos. 

Todo el mundo me desaconseja dormir con mi hijo, que es terrible el daño que le voy a hacer a él, pero cada vez que se despierta con una sonrisa y me acaricia la cara para informarme que ya está despierto y que tengo que despertarme, me doy cuenta de que estoy haciendo bien. Tengo un hijo feliz!!!!! Y yo soy muy feliz sintiéndolo cerca mío. 

Nunca pensé que tener un hijo iba a cambiar tanto mi perspectiva como mi forma de ser. No me quiero separar de él ni un momento, y eso incluye la noche. Estamos tranquílos y felices y yo disfruto de sentir su respiración acompasada y de ver todos esos detalles que sólo vemos cuando estamos muy cerquita. 

Son infinitos todos los detalles que fui descubriendo de mi hijo al dormir con él y son invaluables los momentos que pasamos durmiendo juntitos y quiero seguir así hasta que él sienta la necesidad y el deseo de buscar su espacio en la noche. Mientras tanto seguiré disfrutando de su cuerpito arropado al mio dándole la seguridad que él me pide.

Si me hubiesen preguntado sobre el colecho antes de tener a mi hijo no sé si hubiese contestado lo mismo que ahora. También en el año que nació Dante pasaron cosas que cambiaron mucho mi forma de ver la vida. La muerte me tocó muy de cerca y en personas que nunca hubiese esperado que me faltaran. Eso me hizo dar cuenta de que la vida puede ser fugaz y si por una de esas vueltas de esta vida no puedo estar cerca de mi hijo demasiado pronto puedo decir que lo disfruté al máximo, que no me perdí de nada.